La primavera no llega hasta que en las paredes del barrio de la Villa de Priego de Córdoba no florecen los geranios. Este lugar es uno de los pocos rincones que quedan hoy en los que aún sigue viva la añeja y bella estampa de la casa andaluza, encalada en blanco inmaculado con rejas de color verde oscuro. Blanco y verde, Andalucía.
Hace 8 años
Gracias Coke por esta pincelada.
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